jueves, 29 de mayo de 2014
domingo, 25 de mayo de 2014
Exposición de fotografía "Metabolismos de la imagen" de Joan Fontcuberta.
El artista nos muestra la transformación de las imágenes en cosas que representan realidades distintas
a las cuales originalmente mostraban, en una forma de hacer cuestionar al
espectador si representan realmente la realidad que muestran o son engaños del
autor.
Lo muestra a través de tres técnicas, la primera, Gastrópoda,
es por medio de caracoles que descomponen las fotografías y resultan en un
producto que representa el deterioro de las imágenes, una concepción de objeto físico
de las fotografías y a una problemática de la noción de autoría de las mismas (el
que la captura o el representado).
La segunda, Googlegramas, lo hace por medio de la representación
de imágenes icónicas a través de miles de otras imágenes obtenidas de internet.
Y en Orogénesis a través
de un software representa paisajes famosos buscando deslegitimizar la realidad.
En general, el
proyecto funciona. Lo hace de manera explícita en googleramas, porque la idea se
muestra a la perfección exhibiendo algo que no está más que en la unión de
miles de otras cosas distintas, la suma de las partes crea una existencia que
es diferente a los elementos esenciales.
En Gastropoda también funciona y se muestra de una manera
muy gráfica.
En la última sección a mi parecer no funciona, ya que no percibí que las imágenes aportaran a la idea principal de transformación
y pérdida de identidad de las fotografías.
En general, a excepción de Gastropoda, el
proyecto no me gustó, la idea de crear imágenes no me atrae, me parece simple y
en este caso particular anacrónico. En palabras simples me resultó aburrido
porque no conecté con la idea principal y las imágenes para mi eran simplemente
eso, no representaban una concepción más elevada acerca de algo, y como fotografías
por sí mismas, al ser manipuladas o creadas, resultaban de poco interés.
El
espacio resulta adecuado para una exposición del tamaño de esta. El lugar es
propicio y cumple con los requerimientos básicos, me refiero a que está ordenado,
limpio y en perfectas condiciones. Ciertamente habían unas obras que no pude
apreciar bien porque estaban ubicadas muy arriba, esto ya sea porque eran muy
altas como en el caso de la fotografía del payaso o porque había una sobre otra,
como lo eran los dos paisajes en blanco y negro de orogénesis. En general el
lugar me resultó acogedor a excepción de la entrada que funcionaba mas como un
espacio en tránsito que como una gran bienvenida a la muestra, de hecho mi
reacción fue de sorpresa al percatarme que ya me encontraba en la exposición
misma.
Dentro de las 3 secciones en las cuales se dividía la
exposición la que me resultó más interesante fue Gastropoda, tanto por su
significado como por las imágenes mismas, me pareció novedoso y que transmitía
el mensaje a la perfección, a la vez que se mostraban fotografías interesantes.
Es así como elijo a las fotografías de
esta parte como las fuertes dentro de la exposición completa. No destaco ninguna
en particular porque según mi opinión eran todas similares pero como un todo
funcionaban bien.
Es por esto que el ordenamiento me resulta efectivo, es
decir, la parte más potente al comienzo de la exposición y dejar las otras al
final para una observación posterior. Un
asunto que me molestó (algo super personal y que probablemente no tenga asidero
de ningún tipo) es que la primera imagen que uno percibía cuando llegaba a la
exposición, fuera la representación de la última cena en la
mitología cristiana, me parece que no es una buena elección y que entrega un
mensaje errado acerca del todo.
En conclusión la exposición era adecuada y buscaba desarrollar una idea, pero que ésta, en su mayoría, resultaba poco interesante por lo poco novedosa y lo artificial de la técnica.
lunes, 12 de mayo de 2014
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